¿Qué es una hernia discal?
La hernia discal, protrusión o hernia de disco, ocurre cuando una parte del disco intervertebral (almohadilla de cartílago que separa las vértebras entre sí) sale de su sitio y comprime una o más raíces nerviosas. En casos graves, también puede darse la circunstancia de que, en lugar de afectar solo a las raíces nerviosas, se comprima la médula espinal. Esta última situación, llamada mielopatía compresiva, es mucho más grave y depende del segmento vertebral y de las características particulares de la hernia.
¿Puede haber recidiva tras operar una hernia discal?
Si. La cirugía de la hernia de disco más avanzada consiste en extirpar por métodos mínimamente invasivos el trozo del disco intervertebral que está fuera de sitio, así como cualquier otro fragmento potencialmente peligroso. De esta forma se preserva la mayoría del disco intervertebral con el objeto de mantener la flexibilidad y las características fisiológicas del segmento vertebral. Tras la cirugía, se indican un series de ejercicios y estiramiento y se desaconsejan determinadas posiciones y situaciones especialmente la “carga de la columna en flexión” por ser la que más se asocia a un incremento de la presión dentro del disco intervertebral.
La recidiva se caracteriza por la reaparición consistentes de los síntomas iniciales acompañada de la salida de un nuevo fragmento de disco intervertebral en el mismo segmento vertebral y del mismo lado derecho o izquierdo.
No es posible eliminar completamente la posibilidad de que existan recidivas, sin embargo el riesgo de sufrir esta complicación se ha reducido con los métodos modernos de la cirugía endoscópica y mínimamente invasiva a su mínima expresión (se observa en aproximadamente 1-2% de los pacientes operados con endoscopia).
Ante la recidiva de la hernia discal se debe actuar de forma individualizada y en función de los síntomas y deseos del paciente. Las opciones son bien implementar un ciclo de tratamiento conservador, bien realizar una revisión quirúrgica de la zona.
Cómo cuidar la espalda tras una operación de hernia discal
Es importante empezar a moverse cuanto antes, el mismo día de la cirugía si posible. En general se deben retomar progresivamente las actividades de la vida diaria así como las actividad laboral. Cada paciente es único y única es la experiencia del postoperatorio. En algunos pacientes el médico debe incentivar el movimiento y el incremento de la actividad mientras que en otros debe recomendar prudencia.
¿Qué hacer si tras la operación reaparece el dolor?
Después de las operaciones de hernia de disco lumbar el dolor se reduce inmediatamente, aunque no en todos los casos. En algunos pacientes la recuperación se hace esperar y el dolor desaparece progresivamente en cuestión de semanas. Es habitual que los pacientes experimenten episodios de “recuerdos” de dolor tras la cirugía al final de la tarde o en relación con la actividad. Son parte del postoperatorio normal así como las molestias en la zona de la incisión.
En caso de que los síntomas persistan por semanas o se presenten nuevamente de forma consistente y contínua se deberá realizar un nuevo estudio de resonancia magnética que confirme el diagnóstico de recidiva de hernia de disco.
Podemos ayudarte si padeces de alguna hernia discal o si sospechas que tras una operación ha vuelto. Valoraremos tu caso y te recomendaremos lo mejor para tu salud y tu calidad de vida.
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